¿Acaso debería?

¿Acaso debería denunciarlo? Mi mejor amigo hizo algo horrible, algo despreciable. Si no digo nada podré ser catalogada como su cómplice y enfrentar tal vez ese cargo. Si hablo probablemente mi amigo me deje de hablar. De todas formas no sé exactamente a donde ir. Creo que lo mejor sería hablar con la víctima y decirle que mi mejor amigo se confesó conmigo. El problema es que no conozco a la víctima, no tengo su contacto y no vivo en el mismo país.

Me siento culpable de conocer la historia. Pero él se acercó a mí y me la contó porque lo necesitaba, porque me tiene confianza. Recordándolo bien, no me dijo nada sobre callar. Pero me sentí tan asustada que preferí quedarme en silencio, para ver si olvidaba lo que me había dicho.

Ahora, años después, siento la necesidad de contarlo, de gritarlo a los cuatro vientos. Pero al mismo tiempo me da vergüenza hacerlo después de tanto. Aunque dicen que es mejor tarde que nunca. ¿cómo hacerlo? Deberé esperar a volver a aquel país de mi adolescencia para ir a la policía y denunciarlo. No creo que mantendré mi identidad como anónima, creo que prefiero que él sepa que fui yo. Porque es mi amigo y porque él me lo contó y porque todo esto no debe quedar así, en las nubes. Todo esto debe bajar y estar a la vista de todos. Porque si quiero que la justicia haga su trabajo, debo comenzar yo misma.

Laisser un commentaire